Inicio
En Enero del año 1974 la pareja de origen sueco, Hans y Lillemor Larsson abrieron el primer Café de París en Corona Blanca.
Una empresa fundada desde el corazón pero con una estrategia empresarial muy definida:
Recrear la atmósfera de las cafeterías de Paris pero llenándolos de dulces y sándwiches típico sueco y del café filtro ya que en aquellos tiempos los suecos eran los turistas principales.
Los dulces y tartas se elaboraban allí mismo de forma artesanal y siempre cuidando al máximo la calidad de la materia prima.
Con el paso de los años el concepto se ha refinado hoy se sigue ofreciendo dulces y tartas suecas pero también alemanes españoles etc y el café filtro sigue también allí pero hoy también hay café espresso italiano de alta calidad.
Pero la atmosfera sigue siendo la misma……
Después de la retirada de los empresarios suecos, el Café de París continuó su carrera comercial en manos de su hijo, Stefan Larsson y un empresario canario que tuvo la oportunidad de crecer profesionalmente dentro del negocio, José Monroy.
Y hoy se sigue elaborando los dulces y tartas de forma artesanal pero hoy por razones de espacio se elaboran en una nave en el polígono industrial de Arinaga.